El 5 de junio estarán defendiendo “Las Gasolineras del Infierno” (Discos de Menta, 25) en Madrid (Sala Maravillas) junto a Ashleys y Remedios Caseros.
“UN ABISMO”, “PVTOMACHO” y “SAMANA” son los tres singles que dan comienzo a un nuevo trabajo musical de Los Primos Chicos. “Odio” se sumó posteriormente para dar forma a “Las Gasolineras del Infierno”, un Ep que funciona como continuación de “Las tribulaciones del alma humana” de 2024. “’Odio’ es una canción diferente a las otras, una sonoridad distinta. Entonces es un poco más difícil, un reto mayor a la hora de enfrentarnos a ella”, explica Antonio (batería, cantante y corista del grupo). Juntos han aprendido a superar obstáculos desde que se conocieron en la adolescencia y formaron un primer proyecto llamado Casasola. Al disolverse, decidieron iniciar Los Primos Chicos. “Hasta que encontramos el camino y volvimos a la guitarra, al rock y a la potencia tuvimos un tiempo de experimentación muy gracioso. Está plasmado en Spotify para quien lo quiera, aunque ya no somos exactamente eso, pero ahí están los inicios”, comenta Edu (cantante principal y guitarrista). A parte de este grupo, Edu forma parte de Melifluo (guitarrista) y estuvo durante un tiempo en Fuente Nueva, hasta que se centró en la banda. Gracias a esto se han podido consolidar como grupo y como compañeros. “Creo que nos ha dado leernos mejor. No gastamos tanto tiempo en transmitir las ideas. No hay que explicar las cosas, sale todo fluido porque llevamos desde 2012 tocando juntos. Es mucho tiempo, son trece años tocando”, añade. Con Casasola adquirieron mucha experiencia, tocando en diversos sitios de Andalucía y Madrid.
"Es reconfortante ver una obra tuya aunque la vayan a escuchar cuatro o cinco mil personas"
Eduardo y Antonio son profesores multidisciplinares, charlamos con ellos sobre la importancia de contar con una formación musical a la hora de formar parte de una banda. Lo que tiene claro el cantante principal es que limita a la hora de crear música. “Para tener un grupo y tocar música moderna como la que hacemos nosotros, no hace falta. Es más, muchas veces te entorpece. Hay gente que no tiene ni idea de que nota está tocando y se le pueden ocurrir unas cosas que si tú sabes el orden de las notas, el sentido que tiene y la relación de los acordes, dirías ‘No puedo hacerlo ni voy a probarlo, no va a funcionar’. Admiro a muchísimos grupos que hacen cosas super locas y que me hacen preguntar cómo se les ha ocurrido. Claro, a mí no se me pueden ocurrir porque tengo un bloqueo en la mente que me dice ‘Eso está prohibido. Ni lo intentes [risas]”.
Los Primos Chicos se autoproducen –suele hacerlo Isra, bajista del grupo– y eso implica que se encuentren, en ocasiones, con complicaciones. “El proceso ha sido bonito y tedioso”. Aunque Edu comparte sentimientos parecidos al decir que “lo he disfrutado a la vez que lo he sufrido. Pero menos que el disco anterior, que fue más largo”. Eso sí, las canciones las componen entre todos. Cada uno lleva al local sus composiciones de una manera distinta y entre los tres le dan forma. “Hasta que terminas la canción se hace largo, incluyendo el proceso de mezcla, que también lo es. Al hacerlo todo nosotros, se hace un poco cuesta arriba, pero después merece mucho la pena. Es reconfortante ver una obra tuya aunque la vayan a escuchar cuatro o cinco mil personas". comenta Edu. Durante este proceso, los discos o artistas que han tenido en bucle los miembros de la banda y que han podido influir han sido: Cora Yako y Biznaga (para Israel); Repion, Parcels y Viva Belgrado (Antonio) y Viva Belgrado, Lola Young, Momma y Nueva Vulcano (Edu).
Para terminar, les invito a que comenten alguna de las canciones de “Las Gasolineras del Infierno”. Empiezan por “SAMANA”. “Salió de la vida cotidiana, de la experiencia de una relación con una persona que te llega de algún modo. La quería enfocar a algo un poco más pop. Yo canalizo las cosas a través de la música, con la guitarra acústica. En mi cabeza sonaba distinta. Con los tres fue como el ‘sonido de Los Primos Chicos’”, comenta Antonio. “UN ABISMO” habla de “desprenderse y liberarse después de haber estado un tiempo oprimido. Habla un poco de los límites, esa odisea de que tu madre te diga que hagas esto, tu pareja que esto otro, y en realidad tú quieres hacer otra cosa”, desarrolla Isra. Es en esta canción en la que utilizan el concepto “gasolinera del infierno” como ese lugar en el que, según Antonio, puedes ir a “repostar, echar un cigarro y relajarte de la presión del mundo”. “PVTOMACHO” nació a partir de una idea de Edu yendo a trabajar. “Yo hago las canciones en mi cabeza, no con guitarra acústica. Me imaginé un break de guitarra porque iba nervioso. Un día propuse probarlo en el local, La canción tiene tres acordes y un ritmo rápido, todo muy simple. Empecé a pegar voces y después de pegar muchas voces en inglés [nunca empieza cantando en español] vimos que estaba guay”. Al ser punk, aprovecharon para hacer una letra reivindicativa. “Para eso está el punk, para meterse en terreno pantanoso y reivindicar cosas que son importantes”.
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.